Manejo de emociones

Identificar las estrategias concretas para manejar mis emociones

¿Cómo puedo ayudar a mi hijo a manejar sus emociones?

Después de haber identificado nuestras emociones, y las sensaciones corporales,
pensamientos y creencias asociadas a ellas, el siguiente paso es recurrir a las estrategias que mejor nos funcionen para manejarlas efectivamente. Estas estrategias las pueden poner en práctica los adultos y pueden enseñarse a niñas, niños y adolescentes de todas las edades.

Es importante darle a las niñas, niños y adolescentes la oportunidad de poner en práctica las estrategias de manejo emocional. Por ejemplo, cuando estén en medio de una discusión en la que claramente está alterado, usted podría preguntarle: ¿Quieres hablar en este momento o necesitas un tiempo para calmarte? De esa manera, está permitiéndole un espacio para manejar sus emociones y usted puede aprovechar para calmarse también. En algunas situaciones también podría ser útil mostrarle que usted está disponible para apoyarlo con preguntas como: ¿Puedo hacer algo para que te sientas mejor?

Las estrategias para manejar las emociones dependerán de la emoción que estamos sintiendo y de la situación. Además, no a todas las personas les sirven las mismas estrategias. Por eso es importante guiar a las niñas, niños y adolescentes para que descubran cuáles son las que más les funcionan. En todo caso, es importante que las acciones elegidas sean cuidadosas. Estrategias como pegarle a una pared, insultar a alguien o recurrir a sustancias psicoactivas no son aconsejables pues solo logran controlar las emociones en cierta medida a corto plazo. Sin embargo, son mecanismos de afrontamiento poco constructivos que pueden traer consecuencias negativas para nosotros mismos, para otras personas o para nuestras relaciones.

Es importante que las estrategias que se elijan para manejar las emociones sean cuidadosas con nosotros mismos, con los demás y con nuestras relaciones.

 

A continuación se presentan algunas ideas de estrategias de manejo emocional que podrían explorarse.

Estrategias para aliviar las sensaciones corporales

 

Como ya se ha presentado anteriormente, las emociones están asociadas a diferentes sensaciones corporales. Por ejemplo, algunas personas sienten un nudo en la garganta cuando están tristes, mientras que otras personas sienten presión en el pecho.
Algunas estrategias para manejar las emociones pueden apuntar a aliviar estas sensaciones. Estas son algunas ideas:

1

Respirar: respirar profundo es una de las estrategias más efectivas para manejar las emociones. A los niños más pequeños se les puede enseñar a respirar con juegos como imaginarse que están soplando un chocolate caliente o que están inflando una bomba.

2

Tomar agua fría o tener contacto con un objeto frío: algunas emociones, como la ira, están asociadas al calor corporal. Es por eso que tomar agua fría o tener contacto con algún objeto frío puede ayudar a calmarlas. Con los niños más pequeños, invitarlos cariñosamente a que toquen un pedazo pequeño de hielo en la mano puede ser una manera de ayudarlos a bajar la temperatura en situaciones que les generen ira o frustración.

3

Realizar alguna actividad física que libere energía: otro tipo de estrategias efectivas pueden apuntar a realizar actividades físicas que liberen energía, sobre todo para emociones como la ira o la ansiedad. Por ejemplo, salir a caminar, correr, montar en bicicleta, bailar o incluso pegarle a una almohada u objeto suave que no vaya a lastimarnos.

4

Desahogarse de una manera cuidadosa: acciones que apunten a que la persona se desahogue, como gritar (sin hacerle daño a nadie), llorar o cantar muy fuerte también pueden ser efectivas en algunas ocasiones para aliviar las sensaciones causadas por emociones como la ira, la tristeza o el miedo.

Estrategias para alejarse o tomar distancia de la situación por un tiempo

 

En algunas ocasiones, es necesario alejarnos o tomar distancia de la situación que nos está generando determinada emoción. Este tipo de estrategias son especialmente útiles cuando estamos sintiendo emociones asociadas a la ira (molestia, enojo, furia). A continuación se presentan algunas ideas al respecto:

Alejarse o darse un tiempo fuera: alejarse de la situación por un tiempo es muy útil para darnos un espacio para tranquilizarnos. Algunos autores llaman a esta estrategia como time-out o tiempo fuera. Invite a las niñas, niños y adolescentes a que le diga explícitamente cuando necesita alejarse (y hágalo usted también cuando usted mismo necesite un tiempo para calmarse). También puede sugerirle en algunos momentos que lo haga con preguntas como: “¿Quisieras estar solo un rato para calmarte y seguimos hablando después?” Es importante notar la diferencia entre preguntarle si quiere darse un momento para manejar sus emociones y obligarlo a hacerlo con frases como: “Vete ya para tu cuarto y reflexiona sobre lo que hiciste”.
Cuando el tiempo fuera es obligado se convierte en un castigo más que en una estrategia constructiva para aprender a controlar nuestros estados emocionales.

Crear un espacio seguro: a los niños más pequeños podemos invitarlos a que decoren y llenen con sus objetos favoritos (por ejemplo, un oso de peluche) un rincón del hogar en el que se sientan cómodos y tranquilos. Podemos incluso pensar con ellos en un nombre divertido para ese espacio, como “el rincón de la calma”. Ese lugar podrá ser utilizado después por el niño cuando necesite calmarse o alejarse un rato hasta sentirse mejor. De nuevo, los adultos pueden sugerir o preguntar al niño si quiere usar ese espacio sin obligarlo o recurrir a éste como castigo. Se pueden utilizar frases como: “Me parece que este puede ser un buen momento para que estés unos minutos con tu osito en el rincón de la calma. ¿Qué opinas?”.

La estrategia de la tortuga: con niños pequeños la alusión a personajes que les hagan recordar las estrategias de manejo de emociones pueden ser muy útiles. En el Programa Aulas en Paz se utiliza la estrategia de “Tuga la Tortuga”, que enseña a los niños a aislarse por un tiempo cubriendo su cabeza con sus brazos hasta calmarse y simulando a una tortuga cuando se mete dentro de su caparazón.

 

Alejarse de la situación por un tiempo es muy útil para darnos un espacio para tranquilizarnos. Sin embargo, cuando el tiempo fuera es obligado se convierte en un castigo más que en una estrategia constructiva para aprender a controlar nuestros estados emocionales.

Estrategias para distraer la mente

 

Estrategias para distraer la mente en algo agradable o que nos tranquilice también pueden ser útiles. Por ejemplo, en un momento donde esté sintiendo mucha ansiedad, podemos poner música suave e invitar a nuestro hijo a que cierre los ojos e imagine que está en su lugar favorito. También podemos invitarlos a hacer alguna actividad que les guste, como pintar, escuchar su artista favorito o ver un programa de televisión divertido.

¿Qué obstáculos y oportunidades representa el manejo de emociones para la educación para la paz?

Creencias culturales sobre las emociones

 

Uno de los obstáculos para desarrollar en las niñas, niños y adolescentes la competencia de manejo de emociones está relacionado con algunas creencias propias de nuestra cultura. Estas creencias se refieren a que demostrar o expresar nuestras emociones es un sinónimo de debilidad. Por esta razón, frecuentemente tendemos a ignorarlas, a intentar suprimirlas o a demostrarlas de formas agresivas para parecer “fuertes” frente a las demás personas.
En realidad, lo que muchas investigaciones muestran es lo contrario a estas creencias. Aprender a identificar nuestras emociones y a canalizarlas constructivamente se asocia con mejor rendimiento académico, mejores relaciones interpersonales e incluso con mejor desempeño laboral en el largo plazo.

Lo que aprendemos de los medios de comunicación

 

Otro gran reto para la educación para la paz con respecto al desarrollo de competencias como el manejo de emociones consiste en mostrarles a las niñas, niños y adolescentes modelos diferentes a los que, en algunos casos, aprenden a través de la tecnología y los medios de comunicación.
El modelo que muestran algunos programas de televisión, películas y personajes en redes, son contrarios a lo que queremos promover en nuestras niñas, niños y adolescentes. Por ejemplo, en las novelas frecuentemente vemos a los personajes recurriendo al alcohol cuando se sienten tristes o enfrentándose a golpes cuando se sienten frustrados o enojados.

Desarrollar pensamiento crítico en las niñas, niños y adolescentes es muy importante para que ellos mismos tengan la capacidad de cuestionar los comportamientos que ven, incluso si los observan en sus personajes favoritos o modelos a seguir. Sentarse con ellos a ver televisión o videos y posteriormente tener conversaciones con respecto a lo que vieron puede ser muy útil para desarrollar pensamiento crítico. Con adolescentes estas conversaciones pueden ser charlas informales mientras hacen juntos alguna actividad cotidiana, como preparar la comida. Algunas preguntas de reflexión que podrían ayudar son:

 

Para niñas y niños

1

¿Qué emociones crees que está sintiendo (nombre del personaje)?

2

¿Por qué crees que esa persona (nombre del personaje) está comportándose de esa manera?

3

¿De qué manera crees que lo que está haciendo (nombre del personaje) le hace daño a él/ella o a otras personas?

4

¿Si pudieras darle ideas a (nombre del personaje) de mejores maneras de calmarse o de sentirse mejor, qué le dirías? (puede empezar usted dándole un ejemplo de una estrategia constructiva para el manejo de emociones e invitar al niño a que continúe la lista)

Para adolescentes

1

¿Qué es lo que más te gusta de este programa, película, canal de YouTube, etc.? (puede usted también compartir con el joven algo que le parezca positivo o divertido del programa, película, video, etc.)

2

¿Cuáles crees que son los intereses de las personas que escriben los guiones y producen este programa, película, video, etc.? (se puede tener una conversación sobre los posibles intereses económicos)

3

¿Qué estrategias visuales y musicales crees que tienen en cuenta estas personas para vender su programa, película, video, etc.? (por ejemplo, música fuerte y ritmos pegajosos, vestuario exagerado, imágenes con mucha luz)

4

¿Qué de lo que muestran en este programa, película, video, etc. es parecido a la realidad y qué no lo es?

5

Si estas situaciones pasaran en la vida real, ¿qué crees que pasaría con los personajes?

6

Si un amigo o amiga tuya se estuviera sintiendo como se está sintiendo (nombre del personaje), ¿Qué ideas de mejores estrategias para calmarse o de sentirse mejor le darías? (puede empezar usted dándole un ejemplo de una estrategia constructiva para el manejo de emociones e invitar al joven a que agregue algunas ideas)